Sus propiedades antioxidantes la convierten en uno de los anticancerígenos de origen natural más efectivo del mundo.
Sus cualidades antibacteriales previenen enfermedades intestinales y reducen la inflamación causada por ellas.
Es su propiedad más potente y ayuda con los síntomas y causas de muchas enfermedades.
La combinación de Cúrcuma con Vitamina D3 ha demostrado tener importantes beneficios en trastornos neurales degenerativos.
Ayuda a regenerar las células rápidamente y así promover la sanación de heridas y la recuperación post-cirugía.
Contiene sustancias que desintoxican el hígado, mejoran su funcionamiento, aumentan la producción de ácidos biliares.